Esguince de muñeca o fractura: Cómo diferenciar las lesiones

Analizando el sonido y la sensación inicial

Una caída sobre la mano extendida es un mecanismo de lesión clásico que puede dejarle con un dolor intenso en la muñeca y una pregunta inmediata: ¿es un esguince o algo peor? La primera pista puede provenir del momento exacto de la lesión. Aunque no es una regla infalible, el sonido que acompaña al trauma puede ofrecer una valiosa orientación. Muchas personas que sufren una fractura describen haber escuchado un chasquido, crujido o un sonido seco y claro, como si una rama se partiera. Este sonido a menudo corresponde al hueso rompiéndose.

Por otro lado, un esguince, que es una lesión de los ligamentos (el tejido conectivo que une los huesos entre sí), es más propenso a producir una sensación de desgarro o un "pop" más sordo y apagado. La sensación es más interna y fibrosa. Inmediatamente después, el tipo de dolor también puede variar. Un dolor agudo, punzante y muy localizado, que se puede señalar con la punta de un dedo, es más característico de una fractura. En cambio, un esguince suele generar un dolor más difuso y palpitante que se extiende por toda la articulación de la muñeca.

Evaluación visual de la muñeca

Después del impacto inicial, una inspección visual cuidadosa de la muñeca puede revelar signos delatores. Compare siempre la muñeca lesionada con la sana para tener un punto de referencia claro.

Deformidad y alineación

Este es uno de los indicadores más claros de una fractura. Si la muñeca parece torcida, angulada o visiblemente fuera de lugar, la probabilidad de que un hueso esté roto es extremadamente alta. Un ejemplo clásico es la "deformidad en dorso de tenedor", donde la muñeca se dobla hacia arriba de una manera antinatural, característica de una fractura de Colles (una rotura en el extremo distal del radio). Un esguince, incluso si es severo, rara vez causa una deformidad ósea obvia. La articulación puede parecer hinchada y grande, pero la alineación fundamental de los huesos del antebrazo y la mano permanece intacta.

Hinchazón y hematomas

Tanto los esguinces como las fracturas causan hinchazón y hematomas (moretones), pero el patrón y la velocidad pueden diferir. En una fractura, la hinchazón suele ser más rápida y pronunciada. Puede aparecer en cuestión de minutos y ser muy localizada sobre el punto de la rotura, ya que el sangrado del hueso llena el área circundante. Los hematomas también pueden aparecer rápidamente y ser de un color púrpura oscuro o negro intenso.

En un esguince, la hinchazón puede tardar un poco más en desarrollarse, a veces durante varias horas, y tiende a ser más generalizada alrededor de toda la articulación. Los hematomas pueden ser menos intensos al principio y extenderse más lentamente por los tejidos blandos. Sin embargo, un esguince grave también puede causar una hinchazón y hematomas significativos, por lo que este signo por sí solo no es concluyente.

La prueba del movimiento y la función

Evaluar lo que puede y no puede hacer con la muñeca es un paso crucial. Sin embargo, es vital realizar estas pruebas con extrema precaución. Nunca fuerce un movimiento que cause un dolor agudo.

Rango de movimiento

Con un esguince de leve a moderado, es probable que pueda mover la muñeca, aunque con dolor y limitación. La flexión, la extensión y la rotación serán incómodas, pero a menudo se conserva cierto grado de movilidad. En cambio, con una fractura, el dolor suele ser tan intenso que cualquier intento de movimiento es prácticamente imposible o provoca un dolor insoportable. La inestabilidad del hueso roto hace que la articulación pierda su soporte estructural, bloqueando el movimiento funcional.

Capacidad de carga

Intente realizar una tarea simple que requiera soportar peso, como levantar un vaso de agua o su teléfono móvil. Si tiene un esguince, es posible que pueda hacerlo, aunque con debilidad y dolor. Si tiene una fractura, la idea de poner cualquier tipo de peso o presión sobre la muñeca será impensable. El dolor agudo y la sensación de que la muñeca "cede" son respuestas típicas que indican una lesión estructural grave que no puede soportar carga alguna.

Puntos clave de sensibilidad al tacto

La palpación cuidadosa puede ayudar a localizar el origen del dolor. Use la punta de un dedo de la mano sana para presionar suavemente diferentes áreas de la muñeca lesionada.

Una característica distintiva de una fractura es la "sensibilidad puntual". Esto significa que encontrará un punto específico, directamente sobre un hueso, donde la presión causa un dolor agudo y exquisito. Por ejemplo, presionar a lo largo del hueso radio (en el lado del pulgar) o el cúbito (en el lado del meñique) puede revelar el sitio exacto de la fractura. Otro punto común de fractura es el hueso escafoides, localizado en la base del pulgar (en la tabaquera anatómica).

En un esguince, el dolor a la palpación tiende a ser más difuso y se localiza sobre los tejidos blandos y los espacios entre los huesos, donde se encuentran los ligamentos. El dolor es real, pero a menudo se describe como un dolor sordo y profundo en lugar del dolor agudo y localizado de un hueso roto.

Cuándo buscar atención médica inmediata

Aunque las pistas anteriores son útiles, la única forma definitiva de diagnosticar una fractura es mediante una radiografía. En caso de duda, siempre es mejor pecar de precavido y consultar a un profesional. Busque atención médica de urgencia si experimenta cualquiera de los siguientes síntomas:

Deformidad obvia: La muñeca está visiblemente torcida o angulada.
Sonido de crujido o chasquido en el momento de la lesión.
Dolor extremo que no mejora o es incontrolable.
Incapacidad total para mover la muñeca, la mano o los dedos.
Entumecimiento, hormigueo o pérdida de sensibilidad en la mano o los dedos.
La mano o los dedos se ven pálidos, azulados o fríos al tacto, lo que podría indicar un problema de circulación.
Existe una herida abierta sobre la lesión (posible fractura abierta), lo que constituye una emergencia médica.